Derrick Rose ha cumplido recientemente 35 años. En 2008, fue elegido como el número 1 en el draft y tres años después se convirtió en el jugador más joven en ser nombrado MVP de la NBA. Desafortunadamente, su carrera se vio obstaculizada por lesiones. Ja Morant, de 24 años, fue seleccionado como el número 2 en el draft de 2019 y tuvo un impacto inmediato en la liga. Sin embargo, ha recibido dos sanciones por su comportamiento fuera de las canchas, siendo la segunda una suspensión de 25 partidos. A pesar de ello, ambos jugadores compartirán equipo en los Grizzlies.
En los Grizzlies, han reclutado a Rose como mentor de Morant, pero él no se ve solo en ese papel. Según dijo ante los medios, no está allí para ser niñera, seguirlo o animarlo. El ex ícono de la Universidad de Memphis afirmó que está allí para presionarlo. Considera que es una gran oportunidad jugar con alguien que tiene un estilo de juego similar y se siente afortunado por ello, aunque reconoce que Morant está en otro nivel.
Morant, al igual que Rose antes de sus lesiones, es extremadamente explosivo, imparable en las penetraciones y posee un gran salto. Sin embargo, sus acciones fuera de las canchas, como beber alcohol, ir a clubes y mostrar armas de fuego, ponen en peligro su estatus como estrella de la NBA e incluso su carrera.
Los Grizzlies ficharon a Rose con la intención de guiar al joven talento. El veterano se puso en contacto con el exjugador Tony Allen para establecer un primer acercamiento con Morant o su padre. Este contacto resultó clave para un regreso de Rose a Memphis que no se había imaginado.
Sin embargo, el base espera ser algo más que un mentor para Morant. Afirma que no estaría ahí si no pudiera adaptarse y comprendiera sus capacidades y los desafíos a los que se enfrenta.
